Cuando la Coalición aliada hundió la armada iraquí en la
guerra de 1991, nadie hizo ningún comentario sobre ello. En realidad, no se
trató de ninguna hazaña bélica. Se trato simplemente del resultado de una
abrumadora superioridad material y tecnológica con la que contaron los
norteamericanos para lograr ese propósito. No hay que olvidar que para
atreverse a enfrentar a Iraq Washington necesito juntar a 32 armadas lo que de
por sí ya informa de la disparidad existente.
Han pasado treinta años
de aquellos acontecimientos y sin dudas que la tecnología militar naval y las
dotaciones que componen actualmente a la Armada estadounidense se hallan entre
las más sofisticadas del momento pero ello y aun así, no les garantiza la
impunidad como en aquel entonces.
A pesar de no haber más
“Saddams” ni espantajos como el “Estado Islámico” para justificar su
permanencia en el Golfo, la Armada de los EEUU sigue allí merodeando sus aguas
y de toda la península arábiga ¿Qué la ha seguido manteniendo en esa región? La
respuesta monocorde es Irán. Pero ¿Qué le ha hecho la república Islámica de Irán
a los EEUU para que se halle asechando como lo hace desde las aguas del golfo?
La respuesta de una parte de los neoconservadores en Washington será la acostumbrada
cantinela que refiere a la intolerable situación de las mujeres iraníes bajo un
estado teocrático, terrorista y blablabla. Del otro lado de otras facciones con
lenguaje más moderado que forman parte de estos sectores neocon, escucharemos
el argumento del “peligro global que representa el desarrollo nuclear de la
república islámica”, dejando entrever en este discurso su alineamiento cerrado
con Israel.
A EEUU ni a sus aliados
(y en particular a Israel) poco le importan los derechos de los iraníes o de
sus minorías o de las mujeres. Recuerden que lo mismo se decía de Iraq y que la
intervención -entre otras excusas- sería para proteger a las minorías
oprimidas por Saddam. Lo cierto fue que tanto los niños sunitas como los
chiitas murieron bajo los escombros de sus hogares tras los bestiales
bombardeos angloestadounidenses y más tarde otros cientos de miles más,
morirían de hambre y por enfermedades que no podían ser tratadas por la falta
de medicamentos impedidos tras la imposición de un embargo inhumano que duró
trece años.
Para Irán esto fue una
lección invalorable. Los iraníes saben que los estadounidenses no harán nada a
la luz del día y que para concretar sus acciones negras lo harán con la ayuda y
la solapada participación de Israel. Es por ello que con la experiencia adquirida
tras varios atentados terroristas contra sus instalaciones nucleares y contra
sus científicos, les ha valido tener que estar alerta ante las acechanzas y con
ello el perfeccionamiento de sus dispositivos de seguridad. Lo mismo en la
vigilancia y seguridad naval, que se ha visto amenazada por operaciones
semejantes y por la fabricación de incidentes en el estrecho de Ormuz y en el
Golfo de Omán en junio de 2019 que trataron se ser endilgados a sus fuerzas
revolucionarias iraníes.
Desde hace tiempo que
Teherán ha venido mejorando sus capacidades de respuesta inmediata ante las
amenazas navales y eso se comprobó el 25 de octubre pasado cuando un petrolero
con sus bodegas llenas de crudo que se hallaba transitando dentro de las aguas
del Golfo de Omán fue interceptado y secuestrado por los destructores “USS The
Sullivans” y el “USS Michael Murphy” de la Armada estadounidense para vaciar su
carga (mediante un alije forzado) y traspasarla a otro buque tanque que
respondía a la operación.
Tan pronto el capitán
del tanquero asaltado advirtió de lo sucedido radió un aviso a Irán donde sin
demora se despacharon comandos helitransportados y una flota de lanchas
artilladas para acudir en su ayuda. La inteligencia de la armada iraní dotada
de Drones de reconocimiento pronto detecto el tanquero que llevaba la carga
robada que venía siendo escoltado desde una distancia prudente por destructores
y fragatas norteamericanas. Una cuestión que no se ha determinado es
¿Colaboraron los emiratos y el sultanato de Omán en dejar hacer esto? Creo que
no ya que, los comandantes norteamericanos no piden permiso ni mucho menos
obedecen ordenes que no provengan de su comando en este caso USCENTCOM.
Cuando el Comando naval
iraní recibió la primera noticia sobre lo que estaba sucediendo, se activaron
sus defensas costeras y la movilización de sus unidades especiales.
La maniobra implicaba
una serie de riesgos para Teherán, pero igualmente la determinación de las unidades
de los Cuerpos de la Guardia Revolucionaria Islámica (CGRI) fue apoyada por el
gobierno y sin dudarlo se puso en marcha una operación de asistencia rápida que
se conoció como “Heliborne” por medio de la cual pudieron abordar el tanquero
que llevaba el crudo robado y redirigirlo a puerto seguro.
La llegada de los
comandos helitransportados fue advertida por los buques norteamericanos pero tan
pronto lo hicieron debieron desviar su atención a la flotilla de lanchas
rápidas que comenzaban a zigzaguearles alrededor. Sin dudas quedo a prueba el
juicio discrecional de los comandantes estadounidenses quienes fueron
conscientes de que si ofrecían alguna oposición quedarían en evidencia en el atraco
ejecutado.
Pese a la notable diferencia
en la potencia de fuego que se presentaba entre las lanchas artilladas (algunas
con un par de misiles antibuque “Kawsar”) y las fragatas con sistemas de
armamento automatizado (Sistema Phalanx), los comandos iraníes lograron su
propósito y evitaron que se consumara este acto de piratería.
Al parecer los
estadounidenses no estaban al tanto de que los iraníes sabían del robo ejecutado
pero tal vez, no les haya importado si lo sabían o no. Incluso era muy posible
que la maniobra hubiera implicado un plan deliberado para la creación de un
incidente armado que argumentara una retórica desde Washington para a su vez
justificar una movilización mayor en la región.
Una última observación
sobre este incidente nos obliga a considerar que no es la primera vez que se
realizan estos atracos e incluso, según las fuentes iraníes que intervinieron
en lograr recuperar el tanquero confirmaron que los buques norteamericanos
intentaron una nueva acción contra otro petrolero que se hallaba en la zona, pero
al parecer sin lograr concretarlo. Lo que si es cierto que esto pone en
evidencia la comisión de acciones ilegales (como lo es la piratería) de un
estado contra los bienes de otro estado soberano ¿Y dónde estaba Naciones Unidas?
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